viernes, 1 de noviembre de 2013

Un viaje en autobús de Castrocalbón a León

El pasado 2 y 3 de Octubre, un reportero de «La Bañeza Hoy» emprendió toda una Odisea: ir aLeón en autobús desde un pueblo de nuestra comarca. He aquí su peripecia.



      EMILIO GARCÍA RANZ  / LA BAÑEZA.- «Volver de León a La Bañeza no fue tan mal. A las 11.45 h cogí en el andén número 4 de la estación de autobuses de León el que venía a La Bañeza... por Benavides de Órbigo. Una hora y cuarto de aventuras y recorridos por diversos pueblos de nuestra provincia.
 Y es que a pesar de que el Alcalde de La Bañeza, D. José Miguel Palazuelo, aseguró, poco antes de que se cerrase la estación de autobuses privada que Alsa tenía en La Bañeza, que los horarios no se íban a  recortar ni las rutas... lo cierto es que sí cambiaron. Se suprimieron numerosos autobuses con lo que hay menos servicios de enlace entre ambas ciudades. Los pueblos de nuestra comarca ya sufrieron recortes... a sumar el de instalaciones de La Bañeza.

Nadie que te diga.
 Llegar a La Bañeza a las 12.55 fue bajar de un autobús e ir corriendo desde la parte de atrás mirando las ventanillas de 5 autobuses a ver cual íba a Castrocalbón... «Tabuyo del Monte...» ¡El siguiente!.
 No hay nadie que te diga ni que te oriente, nadie que informe de qué autobús debes coger. Una persona jóven puede recorrer de atrás adelante en una carrera en unos minutos mirando autobús por autobús cual es el que va a su pueblo... la gente mayor no está para correr y no hay nadie que le informe. Antes unos altavoces informaban «autobús con destino a tal pueblo se halla estacionado en el andén número 2. Va a efectuar su salida».
 Esa misma falta de altavoces e información llevó a una pareja a perder el autobús a León el día 3. Llo- vía, y nos resguardamos en la cafetería del ApartaHotel Infanta Mercedes donde una fotocopia de un cartel pegada en una columna informa de los horarios. Ví a un señor con corbata azulona y me dije ¡este es un chófer! Y le pregunté. Pero no era de los autobuses de línea sino el chófer de una excursión y no nos pudo informar. «El autobús ha salido hace 5 minutos» nos dijo un señor que se estaba tomado un café.
 La pareja clamó indignada «¿pero era ese microbús el que iba a León?. Nosotros pensamos que un autobús tan pequeño sería el que iría a un pueblo...» 2 horas de espera: de una y media a 3 y media que no ha-bía el siguiente autocar hacia León. Así que me dió tiempo a comer, a tomar café, leer el periódico y a ver la televisión en la cafetería del Infan ta Mercedes.
 Cuando llegó el chófer le llovieron las quejas de los usuarios «¡Qué vergüenza que una ciudad como La Bañeza no tenga una estación de autobuses!» «Yo no tengo la culpa, soy un ‘mandao’. Eso es cosa del ayuntamiento» espetó el chófer que hacía las veces de taquillero pues los billetes se venden en el autobús.
 Hay que decir que estaba lloviendo y los viajeros nos estábamos mojando –no hay una marquesina–, y el estar en mitad de la calle por la que transitaban vehículos, era un tanto peligroso, incrementándose el ries-go de atropello ya que la acera pilla justo en el lado de la puerta del con ductor... y no en el de la entrada de pasajeros, que han de acceder al au tocar desde la mitad de la calle donde sólo unas rayas pintadas sobre el asfalto indican que eso es zona de peatones ¡un gran fallo!
 Mi vuelta a León fue parando en to dos los pueblecitos. Claro que la línea si no hiciese todas estas paradas metiéndose pueblo por pueblo igual no sería rentable: 15 viajeros conté al volver de León y otros 15 al ir. Por 4,65 € del billete: 69,75 €. Pa ra el gasoil sí da... para el sueldo del chófer de autocar habría que hacer más cuentas.
 Llegamos a Santa María del Páramo de 3.183 habitantes según el censo de 2012. Mi grata sorpresa: tiene una estación de autobuses (foto izquierda) que envidiamos los de La Bañeza (10.843 habitantes). Os pongo unas fotos de la misma... y del recorrido esperando que la situación de La Bañeza cambie cuanto antes, a mejor.

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